Realizaron un mural en homenaje a Huguito Flores en Buenos Aires
Huguito Flores falleció pero dejó un verdadero legado. Más precisamente en Ituzaingó, allí pasó parte de su infancia, muy lejos de Santiago del Estero donde años después se instalaría y haría historia con su guaracha.
Tal es así que pocos días después del fatal accidente, sus restos fueron despedidos en “la canchita” de pasto sintético del barrio, donde Huguito solía jugar al fútbol.
En las últimas horas se llevó a cabo la inauguración de un imponente mural en la cancha de Fútbol 5 “Los Aranda” (Ignacio Alsina al 4.600, entre Del Cabestro y Tabaré, barrio La Tradición).
La obra, que se encuentra inmortalizada en un gran paredón detrás de uno de los arcos y fue desarrollada por los artistas Damián Ferro y Yanina Vázquez, de manera ad-honorem.
Así es como Huguito continúa más presente que nunca en Ituzaingó, el distrito que lo acobijó de chico previo al salto a la fama musical de la mano de su guaracha santiagueña.
El accidente
Flores falleció en horas de la noche del 20 de septiembre mientras se trasladaba por la Ruta Nacional 34 rumbo a Buenos Aires para ofrecer un show en José C. Paz que tenía previsto para la jornada siguiente, en el marco del Día de la Primavera.
El lamentable hecho ocurrió cerca de la localidad de La Garza, en la provincia de Santiago del Estero. Flores, de 57 años, circulaba a bordo de un Volkswagen Suran junto a su mujer, Carina Soledad Enríquez; y cuñado, Rubén Horacio Enríquez, quienes también murieron.
A bordo del automóvil también viajaba una niña de 3 años, hija del matrimonio Flores – Enríquez, quien sufrió lesiones y resultó hospitalizada con pronóstico reservado. La pequeña permaneció varios días internada, pero afortunadamente salió adelante.