Falleció a los 86 años el ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi
El ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi ha muerto este lunes a los 86 años. El político, actual líder de Forza Italia, volvió a ser ingresado el pasado viernes en el hospital San Raffaele de Milán, menos de un mes después de abandonarlo tras pasar 44 días internado por una infección pulmonar derivada de la leucemia que padecía y por la que estaba recibiendo un tratamiento de quimioterapia.
La salud de Berlusconi había empeorado en estos últimos meses y la preocupación aumentó en las últimas horas. Hasta el centro se habían desplazado varios miembros de su familia este lunes por la mañana, informa la agencia AdnKronos.
El político había sido elegido como senador en las últimas elecciones. Su partido actualmente forma parte de la coalición de derechas que Gobierna en Italia, bajo el liderazgo de Giorgia Meloni, ya estuvo ingresado a finales de marzo en ese mismo centro para someterse a algunas pruebas. Su estado de salud despertó mucho malestar entre sus compañeros de partido, que fueron a visitarlo al hospital. Sus socios en la coalición, como el vicepresidente y ministro de Transportes, Matteo Salvini, o la primera ministra le expresaron públicamente sus ánimos tras conocer su situación.
El estado de salud del que fuera tres veces primer ministro italiano (1994-1995, 2001-2006 y 2008-2011) era delicado, incluso antes de conocerse que padecía leucemia. En septiembre de 2020, en plena pandemia, se contagió de coronavirus y tuvo que ser ingresado tras agravarse los síntomas que presentaba. Pocos meses después, ya en mayo de 2021, volvió a dar positivo y fue ingresado por una infección pulmonar. También ha arrastrado problemas cardiovasculares. Tiene desde 2006 un marcapasos y ha pasado por el hospital por diferentes motivos en los últimos años. Uno de los momentos más delicados fue en 2016, cuando le operaron del corazón. Según los médicos, en ese momento llegó al centro sanitario en unas condiciones críticas. En 2019, también pasó por quirófano por una oclusión intestinal. Más reciente, en enero de 2022, tuvo una infección de las vías urinarias.
Pasado marcado por los procesos judiciales
Además de político, Berlusconi también era empresario, inversor y magnate de los medios de comunicación italianos. Fue el fundador de Mediaset y propietario del AC Milan durante tres décadas y desde 2018 era dueño del Società Sportiva Monza 1912. Natural de Milán, el ex primer ministro ha estado en varias ocasiones en el centro de la polémica. A lo largo de su vida ha tenido más de 40 procesos judiciales abiertos, de los que ha tenido una condena firme por fraude fiscal por aumentar el precio de la compraventa de los derechos de transmisión de películas estadounidenses por parte de Mediaset. Inflaban el importe para evadir dinero al fisco y enviarlo a sus cuentas personales en el extranjero. En este caso, fue inhabilitado para cargo público durante cinco años, de 2013 a 2018, y logró evitar la cárcel por su edad, algo que sustituyó ejerciendo servicios sociales.
Entre sus polémicas judiciales y las que más le costaron a nivel político, destaca el caso Ruby Ter, por el que se investigaba si Berlusconi sobornó a participantes de sus fiestas sexuales en 2010, las conocidas como “bunga-bunga”, para comprar su silencio, por lo que se enfrentaba a un delito de corrupción. Tras más de 10 años de litigios, el pasado febrero un tribunal de Milán le absolvió de esos cargos. Por este caso, Berlusconi fue previamente condenado a siete años de prisión y a inhabilitación de por vida porque los jueces dieron por probado que ejerció abuso del poder e incitación a la prostitución de menores al mantener relaciones sexuales con Ruby, la chica que da nombre al caso, cuando era menor de edad. Pero posteriormente, en 2015, fue absuelto por un tribunal de apelación. Este proceso judicial ha tenido varias ramificaciones y juicios paralelos.
A nivel político, en octubre de 2022 salieron a la luz unos audios privados del presidente, publicados por la prensa italiana, en los que se mostraba afín al presidente de Rusia, Vladímir Putin, del que incluso se declaraba su amigo, y en los que arremetía duramente contra el líder ucraniano, Volodímir Zelenski. “La guerra es culpa de la resistencia ucraniana. No digo lo que pienso de Zelenski“, confesaba en unos audios que fueron grabados durante una reunión que Berlusconi mantuvo con su equipo y en la que exigió máxima confidencialidad.