“Bailarines de fuego”, la última peña del año

“Bailarines de fuego” se llama el espectáculo que La Cruza Danza sube a escena para cerrar el año en formato peña.

El viernes 16 de diciembre desde las 22 horas, en San Francisco esquina Daniel Prados de la ciudad de La Banda, se podrá disfrutar de este último proyecto dansístico liderado por Cristian “Colo” Vázquez.

La performance trabajada durante el año, sumado a un vestuario de colores que se asemejan al fuego, invitan a la atención permanente sin perder los detalles de la obra. Según expresan los propios protagonistas, la meta es transmitir la idea que “el fuego es un pensamiento interno. Siempre ha estado y va estar, y nos hace sentir y volver a creer. Como nosotros con nuestra cultura, nuestra danza, y tradiciones”.

Además de la presentación de la danza, la música tendrá su participación con la presencia de Marcelo Toledo y La Brasita de mi Chala, dos de los artistas consagrados en la provincia y región.

En el transcurso de la noche también actuarán el Buen Augurio, Proyecto Huacke, Soulguaracha y la muestra anual de los talleres de danza, percusión y acrobacia en tela del espacio artístico “Dónde se esconde el sol”.

Para la familia y amantes del folclore en sus distintas expresiones, el estreno de la obra en formato peña dirá “adiós” al 2022, y será puntapié para el recorrido en los escenarios del país del nuevo espectáculo de La Cruza Danza.

Las entradas se encuentran en venta en la disquería de calle Independencia N° 253, local 3 de Galería Gigli, o bien a través de WhatsApp 3855865865.

Más de 15 años

Su estilo irrumpió con fuerza en el escenario de lo tradicional. Resistidos muchas veces, hoy es el ejemplo a seguir de las nuevas generaciones. Descendientes artísticos de Juan Saavedra, La Cruza es el presente de la danza santiagueña.

Actualmente llevan adelante sus prácticas, tanto para el cuerpo de baile estable como para el público en general, en la Sociedad Italiana (Sarmiento al 300) de Ciudad Capital.

Cristian “Colo” Vazquéz es el responsable de la formación. Bailarín y director, se crió desde niño en el folclore, y ese conocimiento lo pudo proyectar en diversas actividades.  Más 15 años han pasado desde aquel inicio, y a pesar que la pandemia no les permitió celebrar con un espectáculo, el regreso fue con todas las luces.

Con varias muestras y participaciones, cierran un año muy productivo, siempre ardientes y en movimiento como el fuego mismo.