Un clan de Tucumán contaba con tecnología para escuchar a la Policía
El clan “Los Carrión” extendió sus actividades a otros barrios del Gran San Miguel de Tucumán, en medio de la disputa con “Los Acevedos” y “Los Toros” por el territorio en la zona de Villa 9 de Julio.
Una investigación antidroga expuso el desarrollo en los últimos tiempos de esta estructura narcocriminal. Según las tareas de inteligencia, la conocida banda ha continuado con el estiramiento, fraccionamiento y comercialización de estupefacientes, dentro de sus antecedes de delitos y el “negocio” ilegal de la droga.
Además, adoptaron la modalidad “delivery” para vender las sustancias preparadas, junto con la proliferación de los llamados “quioscos” para repartir sus productos.
A esas tareas se le sumó la utilización de elementos de comunicación para escuchar los contactos internos de la Policía provincial.
La División Antidrogas de la Policía Federal (PFA) concretó ayer allanamientos en dos viviendas de Villa 9 de Julio, que serían células de esta organización. Los investigadores determinaron que en uno de los puntos se llevaban adelante el fraccionamiento y estiramiento de sustancias; mientras que en el otro sitio, los ocupantes se dedicaban a la comercialización en el lugar y también en la modalidad “delivery”.
“El comprador, mediante un conocido en común con el vendedor, solicitaba la mercadería a través de un llamado telefónico. Ambos pactaban un lugar de encuentro para realizar la operación”, precisaron fuentes cercanas al caso.
En el operativo se secuestraron más de 1.900 dosis de pasta base, unas 200 dosis de marihuana, un poco más de 400 dosis de alprazolam, elementos de corte, balanzas, telefonía celular y dinero en efectivo.
Los efectivos detuvieron al supuesto jefe de la organización y a su principal colaborador, un hombre de apellido Costilla, investigado en la misma causa. Las medidas fueron ordenadas por el juez Fernando Poviña.
Fuente: La Gaceta