Se vuelve viral el desafío de intentar noquear a personas desprevenidas en la calle
Recientemente, las calles de la ciudad estadounidense de Nueva York están sufriendo el retorno de un “juego” macabro y violento. Este desafío, que puede ser tanto parte de una iniciación en pandillas como de gente aburrida y violenta, consiste en golpear a una persona cualquiera en la calle e intentar noquearla de un solo puñetazo.
En los últimos días cuatro ataques no provocados pusieron en alerta a la policía de Nueva York. Una de las víctimas fue una señora de 74 años. También fue atacado un inmigrante colombiano. Michael Alcazar, un detective retirado, explicó: “Los juegos de noquear gente volvieron. El ataque a los neoyorquinos es sumamente real. No podemos bajar la guardia.”
“Estos ataques no son solamente cometidos por personas mentalmente inestables, sino también por individuos violentos que simplemente están enojados o aburridos, y saben que sus acciones no tendrán consecuencias legales.”
Hace casi 10 años, en 2013, hubo un pico de estos ataques aleatorios que se realizan para obtener atención en redes o como parte de algún rito de una pandilla. Este año, según varios reportes de los medios, hubo más de 20 de estos ataques.
Uno fue sufrido por el colombiano Miller Giovanni Medina Vargas, que fue golpeado en la cara mientras paseaba por Central Park. Medina Vargas explicó que no hizo nada para provocar a su atacante que iba vestido totalmente de negro, publica TN.com.ar.
El colombiano añadió: “Simplemente me pegó en la cara, pero por suerte lo pude esquivar. Después me golpeó cuatro o cinco veces más”. También fue atacado en Brooklyn en el subte mientras paseaba con su novia. Esa vez perdió la conciencia por cinco segundos
Un policía de la ciudad explicó: “No importa si es un juego o no, las calles ahora son así. Los delincuentes piensan que se pueden salir siempre con la suya, y la mayoría de las veces tienen razón. Los detenemos y al poco tiempo los soltamos”.
Otro oficial llamado Bill Bratton sentenció: “Esto no solo está pasando en la gran manzana, sino en todo el país. Si la persona está mentalmente enferma, los mandan a observación y después los liberan. Y si están mentalmente sanos, son puestos en libertad mucho más rápido. Los castigos para las personas que cometen estos delitos no son consistentes”.